Estamos ante un auténtico boom editorial, un libro que en Estados Unidos lleva más de 2 años encabezando la lista de libros más vendidos (best sellers). ¿A qué se debe todo esto?. Evidentemente es una buena novela, mezcla los típicos ingredientes de un best sellers, con acción trepidante, aventura, enigmas, misterios, sociedades secretas… Por todo ello un grupo de amigos (pues eso es lo que somos) realizamos una tertulia literaria el pasado viernes día 30 de abril.
Como ustedes comprenderán, no es fácil reflejar en unas líneas escritas todo lo que se puede hablar en una tertulia, ya que lo que más enriquece es escuchar puntos de vista distintos al nuestro, confrontar opiniones, hablar sobre las coindicencias, lo que nos ha parecido, sobre la visión que podamos tener de los personajes, etc. Todo ello se pierde al ser escrito, el ritmo de la conversación, las expresiones de los rostros… En cualquier caso, espero que sirvan estas líneas no como una crítica mas sobre el libro, que de eso hay muchas en Internet, sino como una puerta de entrada hacia un arte hoy casi perdido, que es el de conversar.
¿Y de que hablamos entonces, en la tertulia?. Evidentemente se tocaron muchos temas, la figura de Leonardo, sobre la cual todavía hoy se está investigando sobre sus diseños e inventos; un auténtico genio del renacimiento, que según Dan Brown, el escritor de la novela, perteneció a una sociedad secreta, el Priorato de Sión. Es obvio que a finales del siglo XV, principios de XVI, con la iglesia en pleno apogeo y la Inquisición campando a sus anchas, todos aquellos que pensaban de manera diferente y no querían acabar en la hoguera tenían que ocultarse, de ahí la necesidad de las sociedades secretas. Muchos de los grandes personajes de la Humanidad se dedicaron a estudios filosóficos, esotéricos; si no conocemos más de ello se debe precisamente a la necesidad de proteger su vida. Todavía estaba muy reciente históricamente el ejemplo de los Templarios, y la expulsión de los moriscos y de los judíos de la España de los Reyes Católicos dejaba bien claro las cosas. Necesidad de ocultación para todos los filósofos y libre pensadores en general, y Leonardo posiblemente no fue una excepción.
Otro tema muy controvertido es el de la divinidad femenina, la visión de María Magdalena como esposa de Jesús, y la posible continuación del linaje de Jesús a través de sus descendientes. En general, la conclusión a la que se llegó en la tertulia fue que a fin de cuentas en el fondo es una teoría racista, ya que considerar que la amplitud espiritual de Jesús pueda transmitirse a través de la sangre no tiene ninguna consideración ni científica ni filosófica, ya que sucede que nace un gran científico de padres que no tienen ningún tipo de inquietudes en ese campo, y viceversa, hijos de grandes músicos no estuvieron, ni mucho menos, a la altura artística de sus padres.
Tuvimos la ocasión de ver reproducciones digitales de los cuadros de Leonardo que se hablan en la obra, lo que permitió contrastar la interpretación de Dan Brown y hasta que punto era forzada. Es cierto que en el cuadro de la última cena no aparece ningún Santo Cáliz o Grial, pero de ahí a proponer que el Grial es la supuesta esposa de Jesús, hay un largo trecho no siempre lo bastante claro sobre el tema. Por supuesto, se confrontaron opiniones de todo tipo, y no siempre la coincidencia fue absoluta; eso es lo bueno de las tertulias, escuchar al otro y su manera de pensar.
¡Y tantas y tantas cosas de las que se hablaron y que es tan difícil resumirlas en algo muerto, como una pantalla de ordenador! Quizá lo más interesante surgiese al final de la tertulia, cuando alguien dijo que en el fondo el Grial es una búsqueda, no un objetivo en fin, y que en el propio camino se encuentre la respuesta.
Francisco García